La exposición a temperaturas extremadamente frías durante dos minutos es suficiente para reducir el dolor nervioso y muscular.
Las sesiones de crioterapia repetidas pueden potenciar la presencia de proteínas antiinflamatorias.
La crioterapia restringe el flujo sanguíneo al área del trauma, lo que reduce el dolor y la incomodidad debido a la inflamación.
Hoy en día, muchas personas incluyen sesiones de crioterapia como parte de su régimen de belleza. La crioterapia proporciona un efecto rejuvenecedor en la piel madura y suelta. Estas son algunas de las formas en que las sesiones regulares de crioterapia de cuerpo entero pueden beneficiar su rutina de belleza y antienvejecimiento.